MARQUARD,
Odo, Aesthetica und Anaesthetica. Philosophische
Überlegungen, München, Wilhelm Fink, 2003, 164 pp., 21,4 x 13,3 cm., ISBN
3-7705-3750-5.
Esta
obra contiene 8 artículos compuestos entre 1959 y 1989 con diferentes finalidades. En la
introducción que lleva por título Aesthetica und Anaesthetica, Marquard se
presenta a sí mismo como un anti-escatólogo escéptico, una tradiciona
Respecto a la estetización de la realidad, Marquard
sostiene que, tras una fase revolucionaria, que no trae la salvación prometida, se
propone la salvación de la humanidad en un programa estético, por obra de Schelling, una
nueva mitología que toma la forma de la conexión de todas las formas particulares de
arte (Wagner) o de la destrucción de todas las formas particulares de arte (futurismo y
surrealismo). Habría exclusivamente una obra de arte total, la obra de arte absoluta, que
cada hombre debería tener y vivir en sí y en conjunto, más allá de la cual no hay
ninguna realidad. Lo estético ya no conduce a una experiencia estética, sino a la
anestetización del hombre.
Respecto
a lo postmoderno. Marquard sostiene que se da una futurización del antimodernismo, y
analiza la relación de esta época con el presente en sus diversas formas de
manifestarse, con referencia a las otras dimensiones temporales. El mundo moderno
necesita, como compensación de su desencantamiento, lo estético en la forma del arte
autónomo. Estas son las ideas centrales, que aparecen en los diversos artículos que
componen esta obra. Así, por ejemplo, en Kant y la vuelta de la estética:
Marqueard sostiene que desde el siglo XVIII en adelante la estética se convierte en
filosofía fundamental, y como tal es presentada por unos y criticada por otros. Esta
vuelta de la estética está en conexión con la renuncia de la ciencia (exacta) como
poder dominador y la vuelta a la historia como poder dominante. En el curso que va de una
a otra, en medio de ambas está la estética. Y Kant es el filósofo de esta transición
del pensamiento científico al pensamiento histórico.
En
Para el significado de la teoría del inconsciente para una teoría del arte ya no
bello analiza la célebre sentencia hegeliana de la muerte del arte, desarrollando
la tesis de un arte ya no bello, que es la respueta romática a esta idea, que viene
defendida por las teorías del genio, de la determinación natural del genio y del
incosnciente, con lo que surgen otras categorías diversas de lo bello, prestando una
especial atención a Freud. El capítulo Los exilios de la serenidad expone la
tesis de que la realidad se exilia en el arte, ésta en lo cómico, y éste en la
filosofía, el último exilio de la serenidad, que a su vez es una tristeza, porque no hay
de qué reír.
En
Compensación: reflexiones sobre una pieza del curso del proceso histórico
desarrolla la idea de compensación (término prodcdente del psicoanálisis de Adler, pero
con prehistoria filosófica especialmente en la teodicea y teológica, ya
desde Tertuliano) y la estudia detenidamente como una categoría de la filosofía de la
historia. En El arte como antificción: Ensayo sobre el recorrido de la realidad en
la ficción estudia el ficcionalismo filosófico: las ideae a me ipso factae o entes rationis de los filósofos, los ejemplos
contrafácticos, que se sitúan en la periferia de a filosofía, la zona de los ejemplos
de contraste para lo irreal, que contemporáneamente ha pasado al centro como filosofía
de la ficción de la filosofía (las ficciones heurísticas de Kant y los Als-ob,
la ficción de la idea de verdad en Nietzsche, etc.) y de la realidad de los humanos
condicionada por la ficción, y lo pone en relación con su tesis central del
aniquilamiento escatológico del mundo La realidad moderna toma, como réplica tardía a
la aniquilación escatológica, el camino de lo ficticio: ens et fictum convertuntur ) y el arte se vuelve
antificción (la determinación del arte como sobrepujamiento de la realidad a través de
la ficción. La ficción no es ya el atributo del arte sino el atributo de la realidad
moderna.
En
Obra de arte total y sistema de la identidad. Reflexiones en conexión con la
crítica de Hegel a Schelling estudia las condiciones históricas de la obra de arte
total, que comienza con el sistema de la identidad de Schelling, y la crítica a la idea
de la obra de arte total, que empieza con la crítica de Hegel a ese sistema.
Finalmente
vuelve al tema de la compensación en El arte como compensación de su fin,
donde recoge las ideas expuestas anteriormente.
Se
trata de una obra muy pensada, muy madura y que constituye una fuente de ideas inagotable.